La actriz y comediante Amy Schumer ha dado el “sí, quiero” a su reciente pareja el shef Chris Fisher, en una ceremonia privada en Malibú. Toda su fanaticada ha quedado absorta ante tal noticia debido a que el noviazgo fue confirmado pocos días antes del sorpresivo casamiento, en el cumpleaños de Ellen DeGeneres, aunque ya llevaba varios meses rumoreándose tal relación.
Poco se conoce de Fisher. Es un shef de 36 años de edad, dueño de un restaurante, el Beetlebung Farm, del cual los Obama señalan como uno de sus favoritos. La hermana de Chris trabaja como asistente de Schumer, por lo que probablemente es así como se habrían conocido, a través de ella, según informa el portal Us Weekly. También ha escrito el libro de cocina «The Beetlejuice Farm Coobook: A Year of Cooking on Marthan´s Vineyard».
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La pareja ha escogido el martes 13, a pesar de las supersticiones que genera este día, para celebrar la ceremonia de casamiento. El enlace fue a orillas de una playa en Malibú, al cual asistieron 80 invitados entre los que se encontraban su amiga Jennifer Lawrance, también Jennifer Aniston, Jake Gyllenhaal y Larry David. El comediante John Early fue el encargado de oficiar la boda.
Las imágenes compartidas a través de sus cuentas en las redes sociales son elocuentes de la sencilla pero muy divertida ceremonia. Amy aparece con un vestido ceñido a su cuerpo, de tirantes y encajes en el pecho; un diseño muy acorde a su estilo y clave casual. Perfecto para una boda a orillas del mar. Otras fotos publicadas muestran el esplendor del sitio escogido y marcan la alegría que reinaba en ese momento. Una de estas imágenes compartidas en Instagram aparece Jennifer Lawrence dando un beso en la mejilla a su feliz amiga, Amy.
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Amy Schumer y Chris Fisher comparten el humor que caracteriza a la comediante y, según sus allegados, este gran sentido del humor fue lo que les hizo congeniar desde el primer momento. Al parecer, durante la boda, además de demostraciones de amor, hubo momentos muy divertidos. La relación de Schumer y Fisher se conoció en noviembre, a raíz de una fotografía en la que se les veía cenando, pero ninguno de los dos lo había confirmado o rebatido hasta 3 días antes de su boda. Lo que sí ha desmentido Amy es que no está embarazada.
