Meghan Markle, realizó un viaje relámpago y en secreto a Toronto para reencontrarse con su estilista de confianza Jessica Mulroney quien fuera la “encargada de reinventar la imagen de la actriz en su camino a convertirse en miembro de la realiza británica”, lo cual le permitió a Meghan reencontrarse con sus amigos cercanos, compartir recuerdos, cenas, risas y hasta jugar con los hijos de Jessica quienes la llaman “la tía Meg”.

 

En esta ocasión, la Duquesa de Sussex aprovecho la oportunidad para ponerse al día con todo lo concerniente al círculo que durante una buena temporada compartió con su antigua amiga Jessica, quien con más de 239.000 seguidores en Instagram y siendo considerada como una reconocida insiders de Canadá, se ha apoyado en el poder de las firmas british para imprimir elegancia, prestancia y categoría al nuevo estilo de Meghan, al igual que lo realizara en sus inicios la Duquesa de Cambridge.