Los Reyes Don Felipe y Doña Letizia se han trasladado hoy hasta Logroño para poner el broche de oro a una de sus semanas más agitadas ya que este sábado han dirigido en la capital Vinícola la celebración del Día de las Fuerzas Armadas. Tantos años esta fiesta que ha preferido celebrar en Madrid pero el pasado año se realizó en Guadalajara y se recuperó el desfile aéreo, una tendencia que se ha mantenido en esta ocasión.

Los reyes llegaron poco antes de las 12:00 del mediodía a la calle General Vara del Rey, donde fueron sumergidos en una marea de aplausos y murmullos de los vecinos concentrados cerca de la avenida para poder verles. Una vez instalados, fueron recibidos por la ministra de Defensa, María Cospedal, dirigiéndolos hasta la tribuna mientras izaban la bandera y el monarca pasaba revista a las tropas.

Junto con las voces de los miembros de las Fuerzas Armadas, el Rey se les unió para cantar con ellos ¨la muerte no es el final¨ antes del homenaje a los caídos. Al terminar comenzó el desfile aéreo. Ambos reyes se han sumido en una conversación donde el Rey le indicaba a su esposa cada uno de los aviones que estaban volando mientras Doña Letizia mostraba con cierto interés a las explicaciones del Rey.