Muchas han sido las críticas que han caído en la espalda de Meghan Markle, esto debido a las constantes fallas en cuanto al protocolo que debe ser llevada a cabo por los diferentes miembros de la realeza; pero, en esta ocasión el hijo de la princesa fallecida Diana, ha sido quien ha roto una importante tradición de la familia real.

El duque de Sussex ha demostrado que su principal prioridad es su esposa, incluso ella se encuentra por encima de los diferentes protocolos que incluyen a su familia. Dentro de las tradiciones, la realeza ha viajado al castillo del Balmoral ubicado en Escocia. Entre las actividades pautadas se encuentra la popular tradición denominada “La caza del urogallo real”, la cual se realiza desde el año 1853.

Esta actividad se convirtió al pasar de los años en una tradición, la cual debe ser realizada por los diferentes miembros de la familia real, y así ha sucedido en el presente año, pero el único que no ha participado ha sido el príncipe Harry, esto se debe al amor que le tiene a Meghan Markle quien siempre se muestra en defensa a los derechos de los animales.