Doctor Cavadas, gracias al gran don que Dios le ha dado, ha logrado operar a un joven guatemalteco que literalmente se encontraba “partido en dos” sin poder realizar ningún tipo de movimiento y con un marcado riesgo vital, ya que según el mismo doctor “podría sufrir una meningitis y morir”.
El joven en cuestión, lleva por nombre Wilmer Arias y actualmente tiene 28 años, “quedo tetrapléjico a los 9 años por una bala perdida que, según el propio médico, lo partido en dos”, debido a una “separación completa de la pelvis y la columna”. Tal situación, inmovilizo a Wilmer en el año 1999, sin que dejara a un lado sus estudios.
Sin embargo, en el 2015 los dolores se agudizaron, surgió una “infección masiva con pérdida de la parte inferior de la columna y de la pelvis” que lo obligaron a quedarse postrado en una cama boca arriba por más de 2 años con altos riesgos para la continuidad de su vida, obligándolo a abandonar tanto sus estudios como su trabajo.
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Ante tal situación, en Guatemala los doctores indicaron que no podían operarlo y de igual forma paso en Estados Unidos. No obstante, en España apareció del Doctor Pedro Cavadas que le proporcionó a Wilmer la posibilidad de iniciar una nueva vida, mediante 2 intervenciones realizadas en el Hospital de Manises (Valencia).
El médico cirujano Pedro Cavadas, creador de la Fundación Pedro Cavadas, que nació en el año 2003 con el objeto de proporcionar cirugía reconstructiva moderna a pacientes desfavorecidos de países africanos, absorbió el caso de Wilmer Arias. “Programó una doble intervención. Una para limpiar la zona afectada y colocar un fijador externo entre ambas partes, y otra, que se prolongó ocho horas, para unir la columna vertebral a la pelvis mediante una trasferencia de huesos (peroné) y la piel de la pierna”.
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El éxito obtenido en ambas operaciones por el médico cirujano Pedro Cavadas le permitió a Wilmer la oportunidad de que aun “siendo tetrapléjico, pueda sentarse sin dolor y retomar su vida”, ya que supero la infección y gracias a la unión que realizó el médico en sus huesos ya no padece de los dolores que lo obligaban a vivir como un vegetal.
Después de tres meses, Wilmer gracias a los avances de la medicina y a la ayuda humanitaria ha vuelto a la vida, incluso hasta pudo visitar la playa y con una enorme gratitud hacia el Doctor Cavadas confesó: “esto es increíble”. ¿Cree usted que el Doctor Pedro Cavadas es un hacedor de milagros?
