El príncipe Harry esta semana tuvo un compromiso en su agenda, en el cual no incluía a su esposa Meghan Markle. Un viaje a la reunión anual de Rhino Conservation Botswana, en un papal de patrón, fue confirmado por una fuente directa de la casa real. Los medios no manejaron mucha información con respecto al viaje de trabajo que realizó el príncipe, debido a que el palacio de Kensington no había informado oportunamente.

Hasta la fecha no se cuenta con fotografías de la obra social del Príncipe Harry en Maun, la capital del delta del Okavango, lugar que considera como un segundo hogar.

La preservación de la naturaleza es un tema por el cual el príncipe Harry ha demostrado mucho interés, apoyando a diversas causas que considera importantes y relevantes. Entre ellas se destaca su participación en una jornada que colaboró como piloto en la persecución de unos cazadores en plena acción, donde tuvo que ver la brutalidad de dicho hobbie, interesándose así por la conversación de las especies en peligro de extinción.

Este es un camino que el Duque de Sussex ha ido estudiando y desarrollando gracias a la iniciativa, en primera instancia de su padre el príncipe Carlos, quien también ha manifestado su apoyo a diversos grupos de conservación del medio.

Al momento de aceptar ser el cabecilla de dicha organización ambiental, el príncipe expuso que ha sido todo un honor poder tener la oportunidad de visitar Botsuana a lo largo de toda su vida, hecho por el cual le es muy familiar la localidad y lo considera su segunda casa.