Hace apenas unas horas se presentaron diferentes líderes de las naciones sudamericanas para organizar el Foro de Sao Paulo, que según definen ellos mismos, es un espacio de convergencia, debate y acción conjunta nacido del Encuentro de Partidos y Organizaciones Políticas de Izquierda de América Latina y El Caribe, celebrado en 1990 con el auspicio del Partido de los Trabajadores de Brasil.

Hasta la fecha, Cuba había acogido dos ediciones del encuentro, en 1993 y 2001. A la reunión anual del Foro de Sao Paulo en La Habana asisten 479 delegados en representación de partidos políticos de izquierda y movimientos populares y sociales de varias partes del mundo.

El anfitrión de esta magna cita fue el actual presidente de Cuba, Miguel Díaz-Canel, quien cerró la XXIV edición del Foro de Sao Paulo y agradeció a las 625 personas que dieron vida a este encuentro internacional, destinado a actualizar los puntos más importantes que atraviesan las regiones.

El Foro de Sao Paulo repudió la política implementada desde Washington, que se enfoca en sancionar a los inmigrantes latinoamericanos, caribeños y centroamericanos. Por otro lado, el Foro alertó que representantes de las distintas empresas transnacionales están operando con niveles de concertación superiores a los normales.