El pasado sábado se celebró en París la boda religiosa de Helena de Yugoslavia y Stanislas Fougeron, quienes el pasado 12 de marzo habían celebrado la ceremonia civil, convirtiéndose en la última pareja de un enlace real en lo que va de año.
El “si quiero” de la pareja real coincidió con el cumpleaños 55 de la novia, quien llegó al altar en brazo del príncipe Serge, su hermano gemelo. Se les vio felices y enamorados en ese día tan especial.
Helena de Yugoslavia es hija de Alejandro Karađorđević, príncipe de Yugoslavia y María Pía Elena de Saboya, quien fuera hija de los últimos Reyes de Italia. Contrajeron nupcias en el año 1955 y de su fruto matrimonial tuvieron cuatro hijos, ambos partos gemelos: Dimitri y Michel que nacieron en 1958 y los gemelos Serge y Helena, quienes vinieron al mundo en el año 1963.
La iglesia Saint-Étienne de Janville se vistió de gala para recibir a los novios de la realeza. Fueron varios los momentos de emoción que vivió Helena y Stanislas en su ceremonia nupcial. Un momento mágico fue el intercambio de anillos que se realizó como parte del protocolo del acto matrimonial.
Foto: Hola.com
Finalizado el acto y a la salida de la iglesia, la princesa Helena se dirigió a sus invitados para darles el tradicional saludo y agradecimiento por compartir con ella su boda eclesiástica, entre los cuales se encontraba su primo hermano el príncipe Emanuele Fililberto de Saboya.
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Luego de la iglesia, se trasladaron a la residencia familiar de Stanislas Fougeron, el castillo de Villeprevost, en donde reside la pareja. Allí aprovecharon para tomarse algunas fotos para el recuerdo, en donde se aprecian muy enamorados y felices de estar juntos. El castillo ha sido la residencia de la familia Fougeron desde el siglo XVIII y cuenta con hermosos jardines que fueron diseñados por el profesional de la jardinería de Versalles.
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Como es habitual en toda boda, la princesa Helena lanzó su ramo de flores, pero lo hizo de una manera poco habitual. Luego los novios dieron apertura al baile enfrente de todos sus invitados, entre los que se encontraban la madre de la princesa Helena, su hijo Leopoldo, Beatrice de Borbón y Dos Sicilias, Sophie de Wurtemberg y Amelia de Borbón y Parma.
Finalmente la recepción continuó en la parte interna del castillo, el cual se ha convertido en un lugar turístico por su interés histórico.
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