De manera milagrosa y oportuna, dos obreros que se encontraban descansando cerca de la entrada principal de un edificio de viviendas en la región de Leningrado, en Rusia, salvaron la vida de un bebé, quien de manera sorpresiva e inesperada cayó desde la ventana de un cuarto piso.

A través de imágenes captadas por una cámara de vigilancia, se aprecia cómo los hombres miran hacia arriba y en seguida se apresuran a colocarse en la base del edificio, apenas unos minutos antes de que el pequeño cayera justo en sus manos.

Mientras uno de los trabajadores se ocupaba del niño, el otro llamaba a una ambulancia. Unos segundos después, apareció un hombre por la ventana desde donde se había caído el niño. En el momento el menor estaba solo bajo la supervisión de la abuela.

El vídeo que ya ha sido viral en las redes sociales, se detalla que el menor solo recibió un leve golpe en una de sus piernas y fue dado de alta tras recibir atención médica en un centro de salud local.