El secretario general del partido socialista Pedro Sánchez, haciendo gala del inmenso respeto que siempre ha tenido el agrado de otorgar a la Casa Real española y luciendo su apuesta estampa acompañada de un caminar extraordinario, ha logrado impresionar a todos los asistentes a la cena de gala que fue realizada en honor al presidente de Portugal, Marcelo de Sousa, en el Palacio Real.

Sánchez al hacer acto de presencia en el salón principal del evento, hizo que “su metro noventa de altura e impecable esmoquin, capturaran los focos e incluso las miradas de los tres anfitriones que nada más al verle sonrieron ante su porte de modelo”. De esta forma, el Rey Felipe VI y la Reina Letizia mostraron su complacencia con la presencia del susodicho, quien tenía un atuendo delicadamente centrado y estrictamente apegado a la formalidad exigida por la recepción.