Algunas veces sucede que en medio de una celebración además de la protagonista, sea otra quien despierta miradas de parte de las demás personas. Eso es precisamente lo que le ha ocurrido a Victoria Beckham.

Resulta ser que el pasado 19 de mayo se celebró la boda entre el hijo menor de Carlos de Inglaterra y Diana de Gales con la que ahora es Duquesa de Sussex, que tuvo lugar en La Capilla de San Jorge en el Castillo de Windsor. Habían alrededor de 530 invitados, entre ellos se encontraban unas de las parejas más esperadas David Beckham y Victoria Beckham.

Una vez que Victoria Beckham acudió al matrimonio generó gran impacto por su increíble estilismo. Y como era de esperar la asistencia de los curiosos y los periodistas, muchos de ellos se mostraron muy interesados en ella que hasta el día de hoy no ha dejado de prevalecer.

Esta vez eligió lucir el color azul marino en su versión minimalista, así como utilizo en la boda del príncipe Guillermo y Kate Middleton. Pues la diseñadora apostó para esta cita con la realeza británica una creación en largo midi en su propia firma, con aberturas sencillas en las mangas un escote que le aportaba originalidad.