Pooh es un gato afortunado que vive en Bulgaria y luego de su operación se convirtió en el primer gato biónico del país. Pero su historia no siempre fue tan feliz.
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Un veterinario llamado Vladislav Zlatinov fue el encargado de realizar la operación. Su propósito era devolverle un poco de la libertad que Pooh había perdido a raíz del accidente. Creía que unas piernas prostéticas podrían ser una mejor opción en lugar de la solución tradicional, que son un par de ruedas para sostener la parte inferior del torso.
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El gato Pooh perdió sus piernas en un accidente. El equipo no está seguro sobre qué fue lo que pasó. Pero creen que perdió luego de que un tren lo atropellara, ya que lo encontraron cerca de las vías del tren en un área rural de Bulgaria.
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Le implantaron un par de piernas de titanio hechas a la medida. Estas se conectan con unas prótesis externas que pueden cambiarse como que fueran zapatos.
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El veterinario cuenta que Pooh estuvo en recuperación durante seis semanas antes de poder probar sus piernas nuevas. Se ha dado cuenta que el gato está consciente de sus prótesis y las intenta mantener limpias. Que suerte que Pooh fue encontrado a tiempo y ahora se encuentra en óptimas condiciones.
