Dicen que los gatos son animales muy dominantes, estas fotografías lo demuestran

La cama que le quedó a este pobre le sirve más de almohada, es muy pequeña para el cuerpo tan grande de este perro. Mientras el ve como se acomoda en ese espacio tan reducido, el gato disfruta de todo el espacio que tiene en esa cama tamaño King.

Este amable perro decidió que le prestaría su cama a su compañero felino, el problema es que el gato no parece moverse de ahí. Este gato se ve demasiado cómodo como para devolverle su cama al verdadero dueño, creo que a este punto ya debería de darla por perdida.

Creo que este pequeño mejor se resignó a que perdió su cama para siempre, el gato está muy cómodo como para devolverla. Este perrito al menos tiene la alfombra que se ve suave, por lo visto el gato no tenía lugar donde dormir y llegó a invadir.

Este pequeño cachorro está pidiendo a gritos que alguien saque al gato de su cama, al parecer nadie llegará a ayudarlo. Aunque si quisiera compartir podría acostarse en la mitad de la cama que quedó libre, creo que hay suficiente espacio para ambos.

Este gato no está dispuesto a ceder su lugar en la cómoda cama de su compañero. El gato ve a la cámara con cara de “ni se preocupen que él se siente muy bien el suelo”, pero todos sabemos muy bien que este peludo extraña mucho su cama.

Este pequeño no podría estar más triste, al parecer el gato ya está más que instalado en lo que será su nueva cama. La mayoría de perros no se atreven a quitar a los felinos de su lugar, y en ese caso estoy  segura que los gatos no se dejarían sacar, ya conocemos el carácter de estos animales.

Este pequeño lucha con todas sus fuerzas para recuperar su cama, ha pasado toda la tarde jalando de un extremo para ver si así se quita. El gato por su parte no está dispuesto a mover una garra para devolver lo que realmente no le pertenece, al contrario él está aprovechando el paseo gratis.

Parece imposible que este diminuto gato le haya robado su cama a este gran Golden Retriever, pero esta es la triste realidad de este perro. De una manera muy tímida se nota que está pidiendo a gritos que su cama le sea devuelta, el pobre no tiene donde dormir.

Que alguien ayude a este perro, quedó en una cama diminuta que no le permite moverse mucho. Del otro lado podemos ver a un gato arrogante disfrutando del espacio que le robo a su compañero, me parece injusto que el perrito deba conformarse con la cama tan pequeña que le quedó.

Este pequeño corgi ya llegó a su límite, con esa mirada lo dice todo. Ya no aguanta que ese malcriado gato esté ocupando su espacio de descanso, una mirada de ayuda es su último recurso para recuperar su cama. El gato no está dispuesto a regresar algo tan cómodo.

Otra víctima más del robo de camas, este pequeño está a punto de romper en llanto. El culpable está acostado atrás, tranquilo como si no supiera que está pasando. A este peludo le fue mal porque el piso de su casa es de madera, esto quiere decir que no pasará una noche muy cómoda.

Esto ya es el colmo, vean el tamaño de ese diminuto gato, este perro es muy noble porque con un ladrido podría asustar al gato y recuperar de una vez por todas su cama. Que alguien le compre una cama nueva a este perro o que saquen al gato, que tortura.

Este perro está esperando el momento oportuno para poder recuperar su cama, está muy atento a todos los movimientos de este gato. Creo que el gato ni siquiera  ha notado que está siendo observado, y la verdad no creo que le importe mucho, él está muy cómodo.

Este pequeño ya no puede más con esta situación, está dispuesto a hacer lo que sea para tener su cama con el esta misma noche. No hay nada mejor que una confrontación frente a frente para resolver los problemas, pero en esta ocasión creo que simplemente será ignorado.

No hay necesidad de señalar donde está el problema, creo que es bastante obvio quien es el culpable. Este gato disfruta de la comodidad de la cama de su compañero de casa, el pequeño perro solo ve a su amo como pidiendo ayuda, alguien que llegue a su socorro.

Estoy segura que los amos de estos dos pequeños compraron la cama pequeña para el gato y la jaula grande para el perro, la pregunta es ¿qué hace el gato en el lugar del perro? Este perro no se ha resignado a quedarse en ese reducido espacio, por el momento será paciente pero no creo que esté dispuesto a ceder tan fácilmente.

Este gato no se conformó con sacar a un perro, el sacó a los dos peludos de esta casa. Creo que está de más preguntar quién es la mascota dominante de esta casa. Ahora bien, no entiendo como estos dos grandes Huskies no son capaces de unir fuerzas y sacar a este gato de la cama.

Este perro demuestra que los perros son los animales más nobles que hay en el planeta, con lo que parece una sonrisa este peludo ya se resignó a que perdió su cama. Creo que alguien debería enseñarle modales a este gato, no puede ser que le haya robado su cama.