Amazon está buscando terrenos para abrir una cuarte sede en el país, según fuentes lo que desean es tomar parte del mercado digital de la segunda economía más grande de Latinoamérica. El objetivo de la empresa es establecerse en Querétaro, el centro industrial de México. Su plan es contratar a desarrollador para que construya una sede enorme. Esta expansión tiene como punto final aprovechar el poder de México para traspasar las fronteras y que este se convierta en el motor de comercio digital para toda la región.

Las compras en línea en México representan el 3% de todas las ventas en el 2017. Sin embargo, un estudio, de la firma Euromonitor Internacional, predice que para el 2022 este número se duplicará. El vicepresidente de Politicas Públicas de Amazon cree que el comercio en línea tiene futuro en México, que puede seguir creciendo y dice que Amazon planea quedarse mucho tiempo más en el país.

Según fuentes, Amazon está buscando un terreno de más o menos 50 acres, lo cual es suficiente espacio para construir una bodega de 1 millón de pies cuadrados. Este tamaño es igual a 17 campos de fútbol y además del espacio para los productos se contempla un área de oficinas.

Querétaro es el lugar ideal para abrir una nueva sede ya que se encuentra cerca de la Ciudad de México y es posible llegar en un día a Monterrey y Guadalajara. Además, en el área se encuentran varias ciudades con población de clase media y plantas automotrices. Tendrían la carretera NAFTA cerca, la cual es la arteria principal para mover producto de las compañías en la región, y el Aeropuerto Internacional de Querétaro, que maneja cargas.

Abrir una sede en Querétaro es una movida inteligente para Amazon ya que les permite atrapar más clientes al ofrecer una entrega rápida y una bodega local disminuye los gastos de envío de los productos. Pedro Villa, dueño de la compañía mexicana Konekte, dice que las entregas rápidas aumentan las ventas ya que los clientes quieren sentir tranquilidad al pedir algo en línea. Aún hay preocupación por los fraudes en las compras digitales, si el paquete tarde 15 días o una semana en llegar las personas querrán su dinero de vuelta.

La nueva seda busca atacar estos problemas y abarcar más mercado en México y la región.