Ver para creer Lewis Hamilton renació en el Gran Premio de Alemania, con una victoria que estuvo amparada por la sorpresiva aparición de la lluvia, que, además, perjudicó a su gran rival, Sebastian Vettel, fuera de carrera después de sufrir los estragos del asfalto mojado. El inglés remontó con facilidad hasta llegar a la rueda de los favoritos y posteriormente se alió con las nubes para dar un vuelco al mundial, que ahora lidera sobre el de Ferrari con 17 puntos de margen.

El piloto británico comenzó una serie de adelantamientos desde el apagado de semáforos que le llevó hasta la quinta posición con rapidez. La superioridad del Mercedes se puso de evidencia en apenas quince vueltas, Hamilton había escalado desde la decimocuarta plaza hasta ponerse detrás de Raikkonen.

Luego de tres horas al fin

A las 19:33, Lewis Hamilton obtenía la aprobación definitiva de la Formula 1 de los comisarios para su victoria en Hockenheim. Al final debió esperar casi tres horas para festejar. La violación del Apéndice L del Capítulo IV del Artículo 4 (d) del reglamento deportivo de la FIA se traducía en un llamado de atención.

Se recopilaron las pruebas de audio y vídeo. Con estos factores sobre la mesa, los cuatro comisarios se encerraron en sus dependencias del circuito. Finalmente, su decisión se fundamentó en tres bases.