LeBron James se sometió a dos resonancias magnéticas (MRI) durante la serie y usaba un molde especial cuando no estaba entrenando, jugando o a la vista de los periodistas, pero durante la rueda de prensa de este viernes luego del cuarto partido sí apareció con la mano derecha protegida. El alero de los Cavs se puso furioso por las decisiones de los árbitros y se lesionó en el vestuario, “Jugué los últimos tres partidos con la mano prácticamente rota”.

La estrella de Cleveland, volvió a acaparar los medios al confirmar que había jugado los tres últimos encuentros con la mano derecha «prácticamente rota» en rueda de prensa tras finalizar el último partido de las Finales de la NBA que perdieron 108-85 ante los Warriors.