La tenista, Serena Williams, de 36 años, ganadora de 23 Gran Slam, cuatro medallas de oro en los Juegos Olímpicos, fue madre de su primera hija el primero de setiembre de 2017. Según se conoció el posparto fue difícil; la deportista tuvo problemas de coagulación y una embolia pulmonar. En diciembre, pocos meses después de una cesárea urgente que trajo al mundo a Alexis Olympia, volvió a las canchas en el torneo de Abu Dhabi.