19 esculturas que parecen de carne y hueso

El rostro de este hombre me sorprende completamente, pues cada detalle está bien elaborado, desde el cabello, hasta las arrugas y la sombra de la barba.

Este chico es como un gigante, parece que estuviera escondiéndose de alguien o algo, por eso la pose y sus brazos cubriendo la mitad de su rostro.

Este bebé se ve tan real, incluso la persona que está enfrente de él desea tocarlo para asegurarse que sí es real. Qué gran obra de arte la de este escultor.

La única razón por la que no creo que este hombre sea real, es porque es gigante, pero parece un hombre sin ropa, pensando. Los detalles de las venas y las arrugas en la piel son únicas.

Esta pareja de niño y niña están abrazándose como si tuvieran un amor muy profundo, pero también parecen hermanos. Estos chicos se ven tan reales, incluso la ropa que están utilizando.

Lo único que te haría ver que esta mujer no es real, es que está trabajada en una escala mucho más pequeña, no tiene tamaño de una persona real. Pero cada detalle en su ropa y sus bolsas de mercado parece ser verdad.

Esta escultura es bastante fuerte, como la mayoría de las que Ron trabaja, pues es un chico de raza negra con una herida de cuchillo en sus costillas.

Esta señora está trabajada en una escala mucho más grande, pues un humano de estatura promedio no llega ni a sus caderas. Es increíble como el cabello se ve tan natural.

Esta escultura es una pareja de viejitos tomando un descanso, disfrutando de la edad y de unas vacaciones juntos. Realmente es una escultura hermosa y bastante real.

Es seguro que si ves esta escultura colgada en tu cuarto te asustas, pues es bastante natural, incluso tiene plumas falsas que muestran que acaba de ser desplumado.

Este hombre realmente está en una canoa sin ropa, está con el rostro preocupado, como si se sintiera perdido, sin rumbo en el agua.

Las verdaderas amigas llegan a estar juntas hasta el momento en que las arrugas y el cabello blanco empiezan a aparecer, eso es lo que percibo de esta escultura de dos ancianitas.

Este hombre parece estar disfrutando de un bronceado perfecto y las vacaciones más relajantes, pero no es nada más que otra escultura de Ron.

Esta pareja de turistas están ahí detenidos eternamente con maletas y cámaras, listos para una aventura. Si los viera en la calle creería que son reales.

Este hombre está escondido entre sábanas y colchas, parece que no quisiera saber del mundo mientras se abraza a sí mismo y cierra los ojos.

Este hombre parece una persona real, con una foto muy de cerca, pero realmente es una escultura de Ron, todo es falso, las cejas, aretes, incluso la barba.

Esta anciana en cama luce enferma, envuelta en sábanas y sin ánimos en su rostro, pues así la quiso crear el escultor Ron Mueck.