El nacimiento de nuestros pequeños es un momento muy especial en nuestras vidas y por supuesto para las suyas. Desde ese primer momento en que estamos embarazadas o nuestra pareja lo está, cada día es un paso más y un paso menos para poder verlo por primera vez, poderla abrazar y acariciar. Ese momento en el que las emociones salen por los poros de nuestra piel sin control alguno.

Pero, ¿te imaginas engendrar un bebé y pensar en él durante 9 meses, esperando poder ver su preciosa cara y notar su corazón palpitar en tus brazos y que, cuando te lo dan por primera vez te das cuenta de que se parece a Gandalf el Blanco? Pues si no eres capaz de imaginártelo tranquilo, hay otras personas que más que imaginárselo lo vivieron en sus propias personas. En las siguientes imágenes lo verás.