El autismo: un trastorno más común de lo que pensabas

El psiquiatra suizo Eugene Bleuler fue el primero en utilizar este término en un artículo publicado en 1912. La clasificación médica del autismo ocurrió hasta 1943 después que el doctor Leo Kanner y el doctor Hans Asperger, quienes realizaban estudios a grupos de niños simultáneamente, descubrieran comportamientos diferentes en todos ellos. Ambos notaron movimientos y conductas “diferentes” en todos los niños, los resultados fueron distintos pero tenían cierto nivel de similitud.

No existe aún un caso donde la persona autista se “haya recuperado” porque realmente no es una enfermedad, pero realizar una intervención temprana de conducta, tratamientos del habla y de cognición puede ayudar a los niños a adquirir habilidades de autocuidado y a mejorar sus destrezas para socializar y comunicarse con los demás.

El número de personas con autismo ha aumentado aceleradamente desde la década de 1980, se estima que alrededor de 1-2 autistas por cada 1000 personas en todo el mundo. Cerca del 1.5 por ciento de niños en Estados Unidos está diagnosticado con este trastorno y hubo un aumento del 30 por ciento.

Entre más pronto se haga el diagnóstico se puede actuar antes y buscar una solución temprana, si a alguien le detectan este trastorno puede beneficiarse al máximo de todas las terapias con una intervención temprana. Existen muchas terapias para mejorar las condiciones y destrezas de los niños que tienen autismo.

Existen muchos modelos propuestos para explicar la causa del autismo, entre las más conocidas están: “Carencia de teoría de mente” que sostiene que las personas autistas son mentalmente ciegas, esto quiere decir que no pueden descifrar el estado mental de los demás, también está la teoría de la “Falta de coherencia central” que sugiere que los niños con autismo prestan mucha atención a los detalles pero no logran integrar las ideas.

La idea de que el autismo puede ser curado se basa en que se trata como una enfermedad, existen tratamientos basados en terapias de la conducta, pero recibe un fuerte rechazo por parte de la comunidad autista debido al uso de aversivos desagradables que son considerados inmorales.

En la actualidad se diagnostica con autismo a uno de cada 68 individuos, y a uno de cada 42 varones. El autismo se ha confirmado que se desarrolla más en hombres que en mujeres pero no existe una causa por lo que esto suceda. El autismo es más común que los casos de cáncer, sida pediátrico y diabetes combinado.

El autismo está separada en cinco tipos de trastornos del desarrollo: el trastorno autista que suele ser el más común, el síndrome de Asperger que se caracteriza por intereses limitados en algo, el síndrome de Rett que afecta más al sexo femenino, el trastorno de desintegración infantil, y PDD-NOS.

Existen varios indicadores prematuros que presentan los niños con autismo tales como: no balbucea ninguna palabra después del primer año, no responde a su nombre, no muestra ninguna receptividad social, no establece contacto visual concreto con nada y alinea sus juguetes de manera excesiva.

De la misma manera los niños con autismo también presentan síntomas tardíos como la falta de interés en tener y hacer amigos, muestran un apego excesivo a determinados objetos, cuando se le intenta modificar su rutina muestra comportamientos de angustia y ansiedad, utiliza un lenguaje repetitivo y no es capaz de mantener una conversación.

Los animales son utilizados para mejorar el comportamiento de las personas con autismo, según investigaciones realizadas se descubrió que las personas que padecen este trastorno consiguen grandes beneficios si reciben terapias asistidas con animales. Los animales preferidos para realizar estas terapias son los perros y los caballos.

Existen muchas asociaciones que apoyan a los padres de familia con niños autistas, en muchas ocasiones no se trata porque en realidad los padres ni siquiera saben que sus hijos tienen este trastorno. Estas asociaciones dan tanto apoyo económico como información acerca del autismo y funcionan como una guía para los padres.

El autismo puede afectar a cualquier persona, no sigue un patrón específico aunque en muchas ocasiones puede ser hereditario. Estos trastornos ocurren en todos los grupos raciales y étnicos y suele ser más frecuente en los varones que en las niñas.

Para detectar este trastorno existen especialistas que se dedican a diferentes áreas que pueden ayudar a hacer un diagnóstico claro de la situación. Si tienes dudas debes acercarte a un pediatra del desarrollo ya que están capacitados en el desenvolvimiento del niño, los neurólogos que tratan el cerebro y los nervios y psicólogo/psiquiatra que son expertos en la mente humana.

El miembro del Comité de la Sociedad Nacional de Autismo en Estados Unidos, creó en 1963, una cinta conformada por piezas de rompecabezas aludiendo a la complejidad de este trastorno. Las piezas del rompecabezas son de distintos colores mostrando la diversidad de personas que la padecen.

La Asamblea General de las Naciones Unidas declaró el 2 de abril como el Día Mundial de Concienciación sobre el Autismo, para mostrar la necesidad de mejorar la calidad de vida de los niños y adultos autistas exigiendo que tengas una vida plena y digna donde no se vean excluidos dentro de la sociedad.

Se sabe que los niños superdotados tienen características muy parecidas al autismo, tales como la introversión. Todo esto se suma a la especulación de que figuras históricas como Isaac Newton y Albert Einstein posiblemente tenían síndrome de Asperger.

Estudios muestran que cuando los padres de familia tienen sospechas de que algo está mal con sus hijos, generalmente están en lo correcto. Así que si tienes dudas e incertidumbres acerca del desarrollo de tus hijos no esperes mucho tiempo y acércate con especialistas en el tema.