Seguramente ya se fueron los días de las clases, las mochilas pesadas y las horas de juegos interminables, ese tiempo en el que solías llegar a casa a terminar algunas tareas y a jugar toda la tarde. Todos y todas jugamos en algún punto a ser adultos, a ser mamá y papá, todos usamos sus zapatos, ropa o maquillaje.

Si recuerdas algunas de estas divertidas cosas que hurgaste del clóset de mamá, entonces seguramente cometiste más de uno de estos errores durante tu crecimiento. Yo soy culpable de algunos, conócelos y recuerda lo que tú hacías.