Javier Sánchez, después de haber demandado y pasar veinte años buscando ser reconocido como hijo de Julio Iglesias, contrató a un detective que siguió a Julio José Iglesias, segundo hijo del cantante, logrando recoger de un cesto de basura un envase de agua en donde se encontraba el ADN de la familia Iglesias.
Luego, utilizó el botellín para realizarse la prueba que resulto 99,9% “abalando la relación entre el patriarca de los Iglesias y el denunciante”, lo cual le permitió, el pasado año, llevar la prueba al juzgado de primera instancia de Valencia.
Foto: 7Televalencia
El mencionado juzgado, ha enviado en dos ocasiones la misiva a Julio Iglesias con el objeto de hacer del conocimiento del cantante la obligación legal que tiene de responder a la demanda de paternidad, sin obtener ningún resultado, motivo por el cual, se le enviará un nuevo escrito que “será la tercera y última oportunidad para el cantante, si no quiere que se le acuse de obstrucción a la justicia”, debido a que el juez está al tanto de la resistencia que se ha presentado en las dos oportunidades anteriores para la entrega de la notificación de la demanda.
Lo cierto, es que el patriarca ha solicitado que le envíen la misiva a Punta Cana, lo cual pareciera que es un nuevo intento para dilatar el juicio. En cualquiera de los casos, el juzgado de Valencia ha acordado que la notificación sea enviada al domicilio de Julio Iglesias que está en Marbella. Así que se terminaron las escusas, o acepta la notificación o la demanda incrementará sus costos.