Adquirir una vivienda propia en México puede parecer complicado, especialmente para las y los jóvenes que apenas comienzan su vida laboral y no cuentan con un ahorro fuerte. Sin embargo, el mercado inmobiliario ha comenzado a responder a esta realidad, ofreciendo soluciones enfocadas en la posibilidad de compra sin enganche, adaptadas a los ingresos y ritmos de vida de las nuevas generaciones.
En este artículo desglosamos cómo funcionan estos esquemas, qué debes tomar en cuenta, qué instituciones participan y cuáles son los requisitos generales. La clave está en informarte bien y analizar cada opción según tu perfil y tus posibilidades.
¿Qué significa “sin enganche”?
Cuando se habla de comprar un departamento sin enganche, se hace referencia a que no se requiere un pago inicial (o anticipo) para acceder al crédito o firmar contrato. Tradicionalmente, los desarrollos exigían entre un 10% y 30% del valor total del inmueble como pago inicial. Pero algunos esquemas eliminan esta barrera, permitiendo comenzar a pagar únicamente con cuotas mensuales o tras obtener el crédito hipotecario aprobado.
Estos modelos están diseñados especialmente para quienes aún no han logrado reunir un ahorro significativo, pero tienen ingresos estables y un buen historial crediticio.
Opciones actuales para jóvenes compradores en México
1. Programas gubernamentales
Instituciones como el INFONAVIT o FOVISSSTE han comenzado a actualizar sus modelos para incluir productos dirigidos a jóvenes, incluso sin experiencia crediticia. Programas como Unamos Créditos permiten que dos personas (incluso sin relación familiar) unan sus créditos para adquirir una vivienda.
También existen convenios con desarrolladoras que aceptan estos créditos como forma de pago sin requerir anticipo.
2. Créditos bancarios con esquemas sin enganche
Algunos bancos en México —como BBVA, Santander o HSBC— ofrecen productos de financiamiento hipotecario con bajo o cero enganche, aunque suelen pedir que el costo del avalúo o los gastos notariales sean cubiertos por el comprador.
En ciertos casos, si tu perfil crediticio es fuerte, pueden absorber parte de estos gastos como promoción, eliminando la necesidad de anticipos.
3. Alianzas con desarrolladoras privadas
Diversas inmobiliarias y constructoras, como Vinte, Sadasi, Grupo Herso o Ara, cuentan con esquemas dirigidos específicamente a jóvenes profesionistas. En ciudades como Querétaro, León, Toluca, Puebla y la CDMX, ya se ofrecen desarrollos con la posibilidad de pagar en cuotas sin anticipo, siempre que el comprador esté preaprobado por alguna institución financiera.
Estos modelos suelen incluir pagos mensuales fijos durante un plazo definido antes de la escrituración, funcionando como un sistema de prepago que sustituye al enganche tradicional.
¿Qué necesitas para aplicar?
Aunque no requieres enganche, sí debes cumplir con algunos requisitos generales para comprar un departamento bajo estos esquemas:
- Tener entre 18 y 35 años (algunas opciones aceptan hasta 40).
- Comprobar ingresos estables (por nómina, actividad profesional o freelancing).
- Buen historial en Buró de Crédito.
- En algunos casos, estar registrado ante el SAT y tener RFC activo.
- Contar con identificación oficial y comprobante de domicilio.
Adicionalmente, podrías necesitar una precalificación de INFONAVIT o de la institución financiera con la que vas a trabajar.
Ventajas de comprar sin enganche
- Acceso temprano al patrimonio: No necesitas esperar años para ahorrar un anticipo.
- Flexibilidad en pagos: Muchos modelos permiten pagos mensuales accesibles desde el inicio.
- Evitas endeudarte con préstamos paralelos: No requieres solicitar un crédito adicional para cubrir el enganche.
Aspectos a considerar
Antes de comprometerte, revisa con cuidado los siguientes puntos:
- Tiempo de entrega del inmueble: Algunos esquemas sin enganche aplican a desarrollos en preventa, por lo que podrías esperar entre 12 y 24 meses para habitar tu departamento.
- Compromisos firmados: Asegúrate de que las condiciones estén por escrito y que no haya penalizaciones ocultas en caso de que no puedas continuar con el proceso.
- Incrementos en cuotas: Revisa si los pagos mensuales están fijos o si aumentarán en cierto periodo.
- Condiciones del crédito final: Aunque no pagues enganche, deberás firmar un crédito hipotecario. Infórmate bien sobre tasas, plazos y CAT (Costo Anual Total).
Alternativas si no cumples con todos los requisitos
Si aún no estás en condiciones de aplicar por un crédito o iniciar pagos mensuales, puedes comenzar a prepararte:
- Consulta tu puntuación en el Buró de Crédito.
- Abre una cuenta de ahorro específica para gastos iniciales (notaría, avalúo, mudanza).
- Evalúa tu presupuesto mensual y detecta posibles ajustes.
- Investiga simuladores de crédito en instituciones como CONDUSEF o INFONAVIT.
Conclusión
Comprar tu primer departamento sin enganche es una posibilidad real si estás bien informado y haces una planeación financiera básica. En México, cada vez más instituciones están creando opciones que permiten a los jóvenes acceder a un patrimonio sin requerir grandes anticipos. Aunque no todo es inmediato ni sencillo, con constancia, análisis y compromiso puedes dar ese paso clave hacia tu independencia financiera.vadas y productos bancarios, podés estrenar tu primer hogar aunque no tengas un gran capital inicial.