El Mundial de Rusia 2018 llegó a su fin y en el balance final algunas individualidades se revalorizaron tras haber cumplido e incluso superado las expectativas que había sobre ellas antes del inicio del torneo. Una de ellas es Eden Hazard.
El belga, elegido como el segundo mejor futbolista del Mundial, por detrás del croata Luka Modric, fue la gran figura de su seleccionado, que logró un histórico tercer puesto y perdió solo un partido en el certamen, 0-1 en la semifinal ante el campeón Francia.
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Mientras el jugador del Chelsea lo daba todo en Rusia, en Italia la Juventus compraba a Cristiano Ronaldo por 112 millones de euros (USD 130 millones) y dejaba al Real Madrid sin su máxima estrella. Pero Florentino Pérez, presidente del club, rápidamente eligió al reemplazante, según anticipó el diario español Sport.
Hazard es el hombre apuntado por la Casa Blanca, el ex director técnico del Real Madrid, Zidane, siempre soñó con tenerlo en sus filas y el Chelsea ya le puso precio a su traspaso. Según señala el sitio británico Het Laatste Nieuws, quien quiera llevarse al mediocampista deberá abonar 225 millones de euros (cerca de USD 263 millones), el doble que pagó la Juventus por Cristiano Ronaldo.
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Además, el conjunto británico estaría dispuesto a hacerle una oferta a quien disponga del dinero y se quiera llevar también al arquero Thibaut Courtois. De esta manera, la institución que desembolse 225 millones de euros por Hazard tendrá también al portero de 26 años por otros 30 millones de euros (USD 35 millones). Según diversas fuentes Lopetegui espera por la confirmación de Florentino Pérez, que tenía planeado pagar 170 millones de euros (casi USD 200 millones), está dispuesto a subir el precio, aunque la inclusión de un arquero en el combo puede tentar al presidente del Real Madrid.
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Se conoce que ambos futbolistas tienen la intención de cambiar de aires y en otras ocasiones han expresado que Madrid es un gran destino. En el caso de Hazard por su deseo de jugar en el club blanco, mientras que en el caso del arquero porque ya sabe lo que es jugar en dicha ciudad, en la cual además vive su hija.
El club quiere a toda costa un portero, que por entonces es De Ge, prescindir por fin de Keylor, Dios mediante; quiere además un central, un lateral, un centrocampista y convertir a Neymar en el plenipotenciario líder del equipo.
