Luego de seis meses de hablar con el artista. Ricky tuvo claro que había encontrado al hombre con el que pasaría el resto de su vida.
La romántica historia de amor de Ricky Martin y el artista Jwan Yosef, que unos meses atrás finalizó en una boda secreta, inició a través de las redes sociales, tal y como ha contado el cantante en varias ocasiones, después de que este descubriera algunas de la obras de su ahora marido y se sintiera intrigado por su atractivo autor.
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Lo que no había explicado hasta ahora la estrellas, es qué impresión le causó Jwan cuando por fin se encontraron en persona, aun cuando ya se conocía a través de mensajes que se enviaban, por lo atractivo que es su ahora esposo no es un secreto imaginar que pensó.
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“Me puse en contacto con él y estuvimos hablando durante seis meses. Sólo nos mandábamos mensajes, hablábamos de la vida y te temas transcendentales. Nada de referencias sensuales, no es como si hubiésemos estado intercambiando fotos subidas de tono o cosas por el estilo, lo juro…Pero en cuanto lo vi me dije “Voy a casarme con este hombre”. Y al parecer él pensó exactamente lo mismo, aunque no me lo contó hasta mucho tiempo después, claro. Al principio siempre quieres reservarte algunas cosas para ti mismo”, explicó el puertorriqueño en una entrevista que le realizó la revista Attitude.
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“La verdad es que cuando le vi me quedé sin aliento. Llevaba seis meses esperando ese momento y fue muy romántico”.
Los cierto es que en el momento en que Jwan llegó a su vida, los planetas parecieron alinearse para el intérprete de “Vente pa’ acá”, ya que además de encontrar la felicidad a nivel sentimental, en el profesional no podía irle mejor, su residencia en Las Vegas y sus sencillos recibieron una impresionante acogida entre el público y su primer trabajo como actor en años en la serie American Crime Story: El Asesinato de Gianni Versace ha sido todo un gran éxito.
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Este proyecto le ha llevado además a recordar esos años en lo que trataba de ocultar su propia orientación sexual y darse cuenta de cómo ese secreto afectó a todos los demás aspectos de su vida.
“Yo me centré completamente en mi carrera. No era capaz de abrirle la puerta a ninguna relación, y no me refiero solo a las románticas, hablo de cualquier tipo de conexión, porque no quería que nadie llegara a conocerme demasiado. Ni siquiera podía sentarme a mantener una conversación distendida con productores o directores, porque tenía miedo de que si pasaba más de dos horas hablando con ellos acabaría dándose cuenta de cual era mi naturaleza”.
