La famosa miembro del clan Kardashian,  Kim Kardashian a quien recientemente debido a una lesión en la muñeca, se le ha indicado que ahora tiene que llevar una muñequera ortopédica y que incluso el médico ha llegado a prohibirle a la socialite que se tome más selfies, por lo que ahora necesita de ayuda para hacerse sus famosa selfies.

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En una reciente entrevista, Kim, que cuida al detalle todo lo que se pone y no cabe duda de que su esfuerzo merece la pena ya que es uno de los iconos de redes sociales a quien más se le copian los looks.  Confesó la ayuda que tiene para lograr ser un icono de la moda. Son muchas las horas que Kim emplea en elegir qué ponerse y cómo combinar la ropa con diversos accesorios, y por eso muchos de sus seguidores se preguntan de dónde saca el tiempo para ser madre de tres niños, acudir a diversos eventos y, además, estar siempre a la última. La propia Kim ha desvelado el truco: usando modelos.

Cierto es que la cuenta bancaria de Kim Kardashian le permite no tener que preocuparse por limpiar la casa, ir al supermercado o pagar los recibos mensuales. Pero eso no quita que tenga que hacer malabarismos con su tiempo para lograr cumplir su itinerario.

Kim Kardashian ha ofrecido una entrevista a People donde desvela uno de los trucos que emplea para lograr economizar tiempo y poder dedicarse a su familia durante más tiempo. Y es que la esposa de Kanye West ha sorprendido al explicar que ella no va de compras a probarse ropa sino que usa a modelos que se la prueban por ella.

Contamos con modelos que tienen mis medidas exactas y que se prueban toda la ropa, la fotografían y hacen ajustes durante horas de los diferentes looks de Yeezy’’, explicaba esta Kardashian a la conocida publicación.

Las modelos me envían los resultados y, finalmente, lo que me guste lo probaré y así me aseguro de que me sienta bien’’, añadía Kim. Así que una vez que la influencer ha comprobado cómo le quedaría la ropa, decide si se la compra o no.

Lo cierto es que es una forma de ir de shopping muy cómoda que ahorra tiempo, energía y evita las molestias como no encontrar tu talla, tener que hacer fila para pagar o esperar horas para entrar al probador. Un lujo al alcance solo de bolsillos como el de Kim Kardashian.