Pablo Nieto y su hermano aseguran que la herencia de su padre, Ángel Nieto, ya está “más o menos solucionada”. Los hijos del campeón 12+1 han contado como han vivido este verano que se cumple un año de la muerte de su padre y al mismo tiempo la situación con la Belinda, ya que no logran ponerse de acuerdo con la viuda.
Trabajo en familia
Pablo y Gelete Nieto no quisieron perderse la fiesta de Movistar+, acogiendo su trabajo en Moto GP. “Seguimos con Moto GP, con Movistar e intentando que nuestros pilotos ganen, somos rivales Pablo y yo y vamos a ver qué pasa” asegura Gelete totalmente emocionado con el trabajo y en donde los hermanos van a ser unos grandes rivales, pero con un pique sano.
Fonsi Nieto quien es primo de Pablo y Gelete quien corría con ellos ahora “Ha vuelto este año al equipo de Moto GP, está como couch y muy contentos de estar los tres en el mundial”. Team Manager son unos de sus rivales, aunque es una competencia sana, si se les puede ganar, mucho mejor.
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El verano
Gelete ha comentado algo: “Muchísimas carreras, muy poco tiempo de estar de vacaciones, pero bueno, alguna semanita sí que hemos pillado y hemos estado un poco en la playa” quien se siente muy afortunado por todo el tiempo que está pasando con su hija, Mía. No podemos olvidar que después de la muerte de Ángel Nieto, la felicidad se la devolvió ella y su pareja, Beatriz Matallana, una estilista famosa.
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“Tengo mucha suerte, me ha salido muy buena, descanso, me lo paso muy bien con ella y disfrutando mucho con ella, la mamá está encantada así que en principio súper contentos” dijo Ángel. Aunque no quieran ampliar la familia, ya que el mismo se ha encargado de decirlo, y no son por razones malas, es porque ellos quieren darle todo el cariño a la niña, menuda ternura.
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¿Qué va a pasar al final?
Las últimas informaciones sobre esto, confirman que ya todo estaba resuelto y que la herencia se la dividieron entre los tres. Por otro lado, Pablo Nieto afirma que ya todo está más o menos solucionado, las otras pequeñeces quedan afuera pero que todo bien y no quiso explicar cuáles eran esas “pequeñeces” pero dejando al visto que después de haber llegado la paz, llega la tormenta.