Por: jsanchez - 9 mayo 2016, 11:42
Las serpientes, estos animales tan amados por unos y tan repudiados por otros, son de las especies más antiguas en el planeta y están presentes tanto en los ecosistemas terrestres como acuáticos. Los sentidos de las serpientes son muy valiosos para ellas, la mayoría de las especies no ven bien y no tienen extremidades, ellas usan su lengua larga que les permite recoger en distintos olores. A pesar de que han sido estudiadas por muchos investigadores, estos reptiles siguen estando llenos de características y comportamientos misteriosos.
Las serpientes son la peor pesadilla de muchos y no es de sorprenderse, son animales traicioneros y peligrosos capaces de matar en un segundo. Conoce a las serpientes más venenosas y por qué deberías de evitarlas a toda costa.
Taipán del interior
Fuente: nationalgeographic.com
La mordida de esta serpiente puede contener suficiente veneno para matar a 100 personas adultas, su veneno es 200-400 veces más tóxico que la mayoría de las serpientes cascabel y 50 veces más tóxico que el de una cobra. El veneno puede provocar parálisis respiratoria, hemorragias severas, fallas renales y complicaciones cardiacas. El veneno tiene acción neurotóxica y podría matar potencialmente en 45 minutos.
La más venenosa de todas
fuente: nationalgeographic.com
Es la serpiente terrestre más venenosa del mundo, pero a pesar de eso es considerada tímida y dócil. Es de color marrón amarillento, mide aproximadamente 1 metro 80 aunque puede llegar a alcanzar los 2 metros. Si te encuentras con una de estas no debes preocuparte pero asegúrate de no estar en su camino.
Fuente: nationalgeographic.com
Echis carinatus
Fuente: nationalgeographic.com
El veneno de estas serpientes pueden provocar dolor en cuestión de minutos, en casos muy severos la inflamación puede extenderse por todo el cuerpo y después de 12 horas se forman ampollas en la piel. Uno de los síntomas más comunes son la hemorragia y la coagulación, también puede producir insuficiencia renal aguda.
No querrás molestarla
Fuente: nationalgeographic.com
Estas serpientes se encuentran ubicadas en el Medio Oriente y en Asia Central, pueden llegar a medir hasta 80 centímetros y se alimentan mayormente de lagartijas, escorpiones e insectos pequeños. Son animales nocturnos y son responsables de muchas mordeduras debido a su naturaleza agresiva, han atacado a varias personas.