El jugador argentino Messi y su amigo el jugador brasilero Neymar fueron elegidos por la empresa Mastercard para desarrollar juntos un proyecto caritativo. Serían los protagonistas de una campaña de solidaridad en América Latina para donar comida a niños hambrientos.

La tan criticada campaña solidaria tenía por objetivo hacer conciencia sobre el problema de la desnutrición y el hambre, empleando diferentes metodologías. Una de ellas era utilizar las redes sociales y promover el uso del hashtag #juntosSomos10 para donar al PMA (Programa Mundial de Alimentos de las Naciones Unidas) una comida por cada uso de este hashtag. Por otro lado, aprovechando el próximo mundial de fútbol Rusia 2018, se donaría por cada gol de Lionel Messi o NeymarJr. 10.000 comidas a niños en condición de desnutrición.

Varios críticos han considerado que la iniciativa de Mastercard era solo una estrategia de marketing de cara a la copa mundial. Uno de ellos fue Andrew Stroehlein, de Human Rights Watch, quien en uno de sus tuits señaló la campaña como “un autogol de relaciones públicas que no tiene precio”. Los países que se tomaron en cuenta para este proyecto también han criticado fuertemente el hecho de que se utilicen a estos dos deportistas y sus rendimientos para esta acción.

Ha sido tan grande la polémica, que Mastercard se vio obligada a eliminar su campaña caritativa y sustituir la donación de los 10.000 almuerzos por más de un millón de comidas dirigida a los niños sin un hogar.