Conoce qué remedios caseros usar para curar estas 15 afecciones

Para ello necesitas una cinta americana gris, con ella cubrirás por 24 horas la verruga. Al término de las 24 horas, retira la cinta y lava la zona con agua y jabón neutro. Te darás cuenta que la lesión está seca, remuévela con una piedra pómez hasta que desaparezca.

Existe otra solución menos “violenta”, pero también necesitarás de cinta. Además de la cinta adhesiva, necesitas un diente de ajo, que cortarás en una fina lámina. Coloca el corte de ajo sobre la verruga y cúbrela con la cinta adhesiva. Repite este procedimiento durante 6 noches y el ajo habrá secado la verruga por completo hasta cortar la raíz. Lo mejor de todo es que no sentirás dolor alguno.

Junto al dolor de muelas, el de oído es un padecimiento brutal. Aunque la medicina moderna ha hallado incontables curas y tratamientos para erradicar este dolor, en la casa también hay soluciones para esta afección.

Para ello, hay que colocar en la entrada del orificio auditivo un trozo de ajo embebido en aceite de oliva. El ajo debe cubrir toda la entrada del oído, con lo que es recomendable no introducir un trozo muy pequeño.

Es de las afecciones dermatológicas más comunes y al ser tan difundida también su cura es de relativa facilidad. El secreto está en la hidratación que puedas dar a tu piel.

Y para ésto no hay nada mejor que aceite de oliva extra virgen. Introduce un trozo de algodón en el aceite y aplícalo sobre la zona afectada, luego espera 15 minutos y frota de nuevo la región con unas gotas del aceite.

Una de las peores ‘cartas de presentación’ es el mal aliento. Por tanto, el cuidado bucal siempre es importante, así como también el tipo de alimentación que se lleva.

Para mantener la higiene de la boca, fuera de la pasta dental, la recomendación más usual es beber yogur natural que no posea aditivos colorantes o saborizantes.

Y siguiendo con los consejos sobre la higiene bucal, un hecho que tampoco da muy buena ‘publicidad personal’ son los dientes amarillos.

Para aquellos que la padecen, hay una solución bien casera. Para blanquear los dientes, hay que cepillarlos por unos minutos con agua y sumo de limón. Recuerda que el sumo debe ser recién exprimido para ganar mayor consistencia.

Este movimiento convulsivo del diafragma se vuelve un fastidio a veces, cuando se está por ejemplo en el trabajo o en una reunión social.

Pero aparte de viejas recetas como un buen susto, para algunos funciona simplemente azúcar. Así que cuando la padezcas puedes consumir una cucharada de azúcar sin respirar, para poder eliminarlo.

La fatiga siempre es un signo de que algo no está funcionando bien en el organismo o que quizás se ha hecho algo en exceso. Pero este agotamiento se puede revertir con un simple chicle de menta o canela.

Sí, una goma de mascar. Por qué? Porque activa el sistema digestivo y estimula la actividad cerebral, con lo que uno está más alerta. También es una excelente fórmula para enfrentar el estrés.

Para tener un cabello sedoso y brillante mucha gente recurre a tratamientos que tienen un costo bastante alto. Sin embargo, hay un consejo bien casero para poder lograrlo.

Para poder tenerlo sólo hay que sustiuir tu shampoo habitual por vinagre de sidra de manzana. Humedece tu cabello y lávalo con el vinagre, luego enjuágalo y deja secar al aire libre.

Distintos tratamientos tienen las cefaleas. Desde tiempos inmemoriales se han ensayado fórmulas caseras para contrarrestar los dolores de cabeza.

Pero a veces, ‘espantar’ estos dolores se vuelve una tarea tan simple como morder un lápiz. ¿Lo intentaste alguna vez? Pruébalo.

Esa incómoda necesidad o sensación de querer expulsar lo comido o bebido es muy común, especialmente cuando hay alguna afección detrás.

Para poder mitigar ésta sensación no hay nada mejor que comer limón y aceitunas. Si no es un caso grave, tendrás buenos resultados con este consejo casero.

Son incómodos y molestos. Estos pruritos pueden producirse en cualquier parte del cuerpo. Por ello, una excelente fórmula para aliviar la picazón es un enjuague bucal, preferentemente el de color azul. Utiliza un pedazo de algodón con un poco de enjuague y aplica sobre la zona de piel afectada. Hazlo dos veces al día, dejándolo actuar por 20 minutos antes de enjuagarlo.

También resulta una efectiva solución si presentas hongos en las uñas de los pies. Mezcla 1/4 de taza de enjuague bucal, 1/4 taza de vinagre y 1/2 taza de agua tibia. Moja tus pies dos veces al día por un espacio de 15 a 20 minutos y pronto le dirás adiós a esos molestos hongos.

Numerosos adolescentes y jóvenes han buscado cuanta receta mágica o alguna fórmula ‘mágica’ para eliminar esta enfermedad que afecta a las glándulas sebáceas. Sin embargo, su tratamiento casero es muy sencillo.

Sólo tienes que triturar tomates y utilizarlos como una mascarilla. La misma la aplicas sobre tu rostro y deja actuar por media hora, para luego enjuagarla con abundante agua. El tratamiento hay que repetirlo a diario.

Para cualquier labor que implique utilizar los miembros, superiores o inferiores, se sabe que casi siempre la faena acaba con una ampolla.

Para poder aliviar el dolor que produce, nada mejor que rozar la zona afectada con repollo. Previamente tendrás que hervir hojas de repollo en leche y colocarlas luego sobre la piel ampollada.

Si pretendes acabar con el mal olor que despiden tus pies o tus calzados hay una forma casi segura para eliminarlo.

Limpia tus pies con un paño humedecido de vodka (sí, vodka) y si quieres extender el beneficio, también limpia tus calzados con este paño.