Los 25 años marcan una diferencia entre la juventud y la madurez, y al momento de cumplir años comienzas a preocuparte y a preguntarte cómo harás para conseguir todo lo que te falta alcanzar.
1. Aún no tienes el trabajo de tus sueños
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Siempre pensaste que a los 25 años estarías trabajando en ese lugar que siempre soñaste, pero ahora que llegaste a la edad te das cuenta que la vida apenas está empezando y te falta mucho por recorrer.
2. Aún vives con tus padres
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Te gustaría mucho vivir en una película de esas en las que los jóvenes de 25 años tienen su propio apartamento en la Gran Manzana, pero el realidad aún vives con tus padres y todavía no puedes trabajar para pagar un lugar.
3. ¿Dónde está la pareja indicada?
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Tus últimos años has tenido relaciones disfuncionales y aunque has pensado que encontraste a Mr. o Mrs. Right, en realidad sigues tan solo como a los 14 años, y todos comienzan a presionarte con que formalices una relación.
4. No sabes manejar tus finanzas y ya creciste
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Es verdad, te preocupa no poder manejar tus finanzas y gastar todo el dinero que ganas en comida, películas, juguetes y salidas nocturnas. Todo era más fácil cuando lo único que debías hacer era romper el cochinito.
5. Aún no sabes cocinar
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Estas en el momento en el que deberías estar pensando vivir solo, pero cómo lo harás si no sabes cocinar nada que no sean sopas instantáneas, atún o algún sándwich.
6. Sientes que no has madurado para nada
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Cuando las personas te preguntan cómo te sientes ahora que cumpliste 25, les respondes que nada ha cambiado. Sigues siendo la misma persona de los 18, y eso es preocupante.
7. Todos tus amigos comienzan a comprometerse
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Muchos de tus amigos en redes sociales comienzan a anunciar sus compromisos con los amores de sus vidas; y tú, sigues tan enamorado de tu perro Spot y estás comprometido con las fiestas.
8. Muchos otros te hacen sentir más viejo al comenzar a tener bebés
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Las fotos de fiestas y graduaciones han cambiado, y ahora tus amigos comparten a sus adorables hijos, algo que ni siquiera puede pasar por tu mente todavía.
9. Tu cuerpo ya no es el mismo de hace 5 años
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En algún momento de tu juventud pudiste beber todo el alcohol que quisieras y comer comida rápida durante el desayuno, almuerzo y cena sin engordar ni un gramo, pero ahora la edad comienza a cobrar la factura y lo que comes se refleja en tu abdomen.
10. Sientes que aún no tienes los suficientes conocimientos
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Creíste que a los 25 años ibas a hablar cuatro idiomas, conocer toda Europa, Asia y África y podrías dar conferencias sobre temas interesantes en varias universidades; sin embargo, comienzas a darte cuenta que aún no sabes lo suficiente y el tiempo está corriendo.
¡Es momento de comenzar a construir tu futuro!
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Si todavía no has hecho nada de lo anterior y comienzas a sentirte frustrado, estás a tiempo, los 25 son un llamado a la madurez y debes comenzar a prepararte para lo que quieres en tu futuro. ¡Tienes algunos minutos para comenzar a crear el plan perfecto para tu vida!