Cae al vacío tras trepar un cable de alta tensión desde un décimo piso
Un hombre falleció este lunes 18 de julio en la ciudad rusa de Vladivostok al caer al suelo luego de trepar a un cable de alta tensión tendido entre dos edificios de diez pisos, informan medios locales.
Los vecinos alertaron a las autoridades cuando notaron que el sujeto comenzó a trepar por el cable desde un balcón, aparentemente para cruzar hacia el edificio de enfrente. Sin embargo, los servicios de emergencia no lograron arribar a tiempo para efectuar un rescate.
La Policía ha iniciado una investigación para esclarecer las circunstancias del suceso y la posible motivación del fallecido.
La corriente sobre un hombre que toca un cable de muy alta tensión (≃ 500 kV y 50 Hz) con ambas manos se puede estimar en ≃ 7 mA. La sensación no sería agradable, pero podrías aguantarla. Un pájaro típico no notaría nada (≃ 0,7 mA). En un cable de alta tensión (≃ 10 kV y 50 Hz) para un humano la corriente sería de ≃ 0,15 mA (para un pájaro sería ≃ 0,02 mA). En cables de alta tensión dentro de las ciudades ni siquiera tendrías una sensación de cosquilleo.
Los cables de alta tensión son muy peligrosos por la cantidad de potencia eléctrica que transportan, y aunque no lo parezca a simple vista, las leyes de la física aplican por igual a las personas y a las aves. Muchas veces pareciera que las aves son inmunes al peligro que representan los cables de alta tensión, pues se posan en ellos como si nada pasara.
La razón por la cual las aves no se electrocutan es porque su tamaño es pequeño y solo alcanzan a tocar un solo cable. Las aves grandes si llegan a electrocutarse porque al extender sus alas pueden tocar más de un cable, provocando un cortocircuito en el que la electricidad comienza a fluir por su cuerpo, aumentando su temperatura y achicharrándolas al momento.
Entonces, para no electrocutarse con los cables de alta tensión las aves no presenta un camino alternativo a la misma, y además no tocan más de un cable ni tampoco hacen tierra. El caso contrario es el que aplican los expertos que revisan el estado del tendido eléctrico, que utilizan un traje de metal para ofrecer un camino alternativo a la electricidad que no sean sus cuerpos.