La existencia de los aliens, es un tema de interés para la gran mayoría, son muchos los científicos que han aportado información ha está hipótesis como también diferentes usuarios han difundido imágenes y vídeos, donde aseguran que los retratados son seres de otro planeta.
Hace algún tiempo, se dio a conocer el supuesto esqueleto de un alien, pero a través de una nueva investigación se ha puesto en duda el análisis esquelético y genómico elaborado a la momia de Atacama, está especie fue denominada como Ata, sin embargo, es más conocida como la momia alien por poseer una forma particular de cono en la cabeza.
La pequeña momia que cuenta con tan solo 15 centímetros de largo, fue encontrada en 2003 en la zona de La Noria, un antigua ciudad minera que se encuentra en pleno desierto de Atacama en Chile.
Un grupo de investigadores de la Universidad de Stanford, en marzo pasado, luego de extraer el ADN la momia, reveló que los restos pertenecían a la momia de una niña con extrañas malformaciones genéticas. Una de estas era enanismo y otros problemas de crecimiento, especificaban que está había muerto poco después del parto.
Sin embargo, está versión de la pequeña momia fue refutada por un equipo internacional, este estaba liderado por la Universidad de Otago ubicada en Nueva Zelanda y dirigido por la bioarqueóloga Sian Halcrow, fueron los encargados de realizarla nueva investigación que estuvo enfocada en el pequeño cuerpo momificado, los hallazgos de la misma fueron publicados en el Internacional Journal of Paleopathology.
El grupo de científicos aseguró no encontrar evidencia de anomalías esqueléticas tal como habían informado los investigadores de Stanford. En el estudio realizado señalan que Ata no poseía malformaciones y que este era un feto normal además que “la extraña forma de la cabeza puede explicarse por las condiciones del parto y del enterramiento" indicaron los científicos.
El equipo de Otago declaró sus preocupaciones sobre la ética y el análisis esquelético y genómico en torno a la investigación realizada en Stanford.
"Desafortunadamente, no hubo razones científicas para llevar a cabo análisis genómicos de Ata porque el esqueleto es normal, las mutaciones genéticas identificadas son posiblemente una coincidencia" indicó Halcrow, citada en una nota de prensa de la Universidad de Otago.
El cuerpo hallado en Agosto, se conserva en una colección privada en España. Tiene 10 costillas, al contrario de las 12 de los demás humanos.