Kiko Matamoros, ante los falsos rumores con respecto a que la ruptura de su matrimonio de 20 años con Makoke es solo un montaje para captar monedas y así poder saldar sus deudas con Hacienda, manifestó sumamente enfadado: “Me molesta la especulación, os importa un carajo llevaros por delante a la gente, criticando a sus compañeros”.
Asimismo, considera que esta forma de proceder de sus compañeros de Salvame, al dedicarse a comentar que su separación es “una simple estrategias para ganar dinero”, solo puede explicarse en personas que “ponéis de manifiesto una falta de profesionalismo”. Por tal motivo, Matamoros adopto una posición incisiva, vertical y extraordinariamente tosca manifestando “os podéis ir a la mierda todos”.
De esta forma, se evidencia que Kiko Matamoros no está dispuesto a aceptar se realicen comentarios inapropiados sobre su lamentable separación de la mujer a quien aún quiere con toda su alma. Sin embargo, sus compañeros se han sentido muy tristes por la reacción del presentador “ya que la mayoría no cree que las dificultades matrimoniales de Matamoros se traten de un montaje”.
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Ahora bien, con respecto a que Makoke decida vender la exclusiva de su separación Matamoros opina: “me parece muy bien, ¿Cuál es el problema si lo hace?”, a pesar de que considera que su exmujer jamás haría una algo así.
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Cabe destacar que una especialista en el análisis del lenguaje corporal de nombre Cristina Soria, se ha dedicado a estudiar “en el programa de Telecinco los gestos de Kiko y cree que se trata de una separación real”, lo cual demuestra que desde la perspectiva de un especialista los padecimientos sentimentales de Matamoros indican la difícil situación que está atravesando tras su separación.
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Mientras en España, no hallan cómo sacarle punta a la que parece la inminente disolución definitiva del matrimonio de Kiko Matamoros, sembrando todo tipo de incógnitas con respecto a su veracidad, el dinero que puede ganarse la pareja y la posibilidad de que exista una reconciliación, Makoke se encuentra a 647,47 kilómetros del presentador, debido a que está disfrutando junto a su hijo, Javier Tudela, de las carreras de caballo a la orilla de la playa en Sanlúcar de Barrameda, Cádiz.
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Por lo tanto, la mala imagen que le han generado a Kiko Matamoros los conflictos que ha protagonizado con su hijo Diego, parecen estar pasándole factura. ¿Cree usted que el presentador logre mantener una reputación intachable después de que se diluyan las nuevas dudas respecto a su separación?