El futbolista Santiago Cañizares y su esposa Mayte García sufrieron la pérdida de su hijo de cinco años, hace un mes, después de una larga lucha contra un tumor en el sistema nervioso, un meduloblastoma en el cerebelo. A pesar de la dura experiencia, los padres recuerdan a su hijo enfrentando la enfermedad con mucha fortaleza y esperanza hasta el final.

Es la primera vez que el futbolista y su esposa hablan de la muerte de su hijo, queriendo ellos transmitir las lecciones y enseñanza que les dejo el pequeño con lo que le toco vivir. Este mensaje se basa en ver los positivo, en evitar caer en depresión o desconsuelo. Ellos narran que su hijo era muy inteligente, un gran sabio, que parecía como textualmente lo dijeron, “que era del mas allá”. Están seguros de que su hijo nació para enseñar, no para aprender.