Hay días en los que los estudios o el trabajo pueden sentirse muy pesados. Nos cuesta concentrarnos y las tareas más fácil se vuelven largas. Sentimos que no estamos dando el máximo. Otras veces tal vez las ideas pareciera que se desvanecieron de nuestra cabeza y nos quedamos horas mirando una pantalla o una hoja en blanco. Si te sientes muy distraido estas son las cosas que puedes hacer para concentrarte mejor en tus actividades.
Organiza las tareas por importancia
Haz una lista de prioridades para mantener un mejor control. Separa las tareas en tres: urgentes, mediano plazo y largo plazo. Trabaja en lo que debes entregar inmediatamente y aparta tiempo para adelantar las tareas menos apremiantes.
Modera las distracciones
El correo electrónico, las redes sociales y los dispositivos móviles pueden ser la causa de tu distracción. Procura no estar conectado a estas cosas ya que evitarán que te concentres. Si no necesitas utilizar estas cosas no te conectes. Establece un horario para cada cosa.
Divide el trabajo
Si te sientes abrumado es porque probablemente estar intentando hacer todo al mismo tiempo. Regresa a las listas de prioridades que realizaste anteriormente y concentra tus esfuerzos en lo que se debe entregar antes.
Programa el tiempo
Utiliza un temporizador para que suene a ciertas horas. Así puedes organizar mejor tu tiempo y puedes ir cumpliendo tareas con el tiempo medido. Esto te permite concentrar toda tu atención en la tarea que tienes enfrente.
Mantén tu espacio de trabajo ordenado
Mantener un espacio limpio y ordenado te ayudará a mejorar el enfoque en las tareas por realizar. Además será más fácil encontrar la información que necesitas y no perderás tiempo en eso.
Toma descansos
Procura levantarte cada cierto tiempo de tu escritorio o alejarte de tu área de trabajo para respirar, estirar tu cuerpo y pensar en otras cosas. Ir al baño o esperar una llamada no cuentan como descansos. Ve a dar un pequeño paseo o lee un libro por cinco minutos y luego regresa a tu lugar.