Un alto cargo del Gobierno estadounidense anunció que «Nadie debería ser forzado a elegir entre ayudar a un enfermo y vivir por sus convicciones morales y religiosas», por lo que se ha dado a conocer una nueva división de Conciencia y Libertad Religiosa dentro del Departamento de Sanidad, de esta manera los profesionales en la salud pueden elegir ante los servicios que prestan si atender o no a estas personas.
Dicho anunció tendrá su lugar en el Departamento de Derechos Civiles, a donde podrán dirigirse las personas que aleguen que se le están violando sus derechos religiosos al obligarlos a hacer un trabajo que sea molesto para estos profesionales del sector sanitario.
El Departamento de Sanidad expresó que “La división se ha establecido para restaurar la implementación de las leyes federales que protegen el derecho fundamental e inalienable de libertad de conciencia y religión. La nueva división protegerá la objeción de conciencia ante la provisión de servicios como los abortos y la atención a transgénero”.
Esta decisión ha sido aplaudida por aquellas personas aún conservadoras y “antiaborto” además de que este anuncio se ha dado a conocer un poco antes de que empezara la llamada “marcha por la vida” la cual es una manifestación que da lugar en Washington D.C.
El Director de la Oficina de Derechos Civiles expresó “el objetivo es ayudar a garantizar que las víctimas de la discriminación ilegal por estos motivos encuentren justicia, ya que considero que los grandes y pequeños gobiernos han tratado con hostilidad en lugar de protección las objeciones de conciencia, pero el cambio ha llegado".
Este viernes Trump se dirigirá a la nación desde la casa Blanca a todos los manifestantes de la marcha que ya ha sido anunciada.